Tras la misa, todos se dirigieron al Convento de la Luz, donde cenaron de la mano de Alberto Mejías Catering. De la decoración floral se encargaron de nuevo los chicos de Leboyerd, que hicieron centros de flores como los de la iglesia, creando así la unión entre los dos espacios.
Antes de la cena, tuvieron un cóctel amenizado por Insakay, donde todos se animaron a bailar.
El segundo vestido, también de Helena Mareque, Carmen lo usó para la fiesta, un vestido de flecos con escote redondo y tirantes, en color blanco roto. Para ese momento, la novia se decantó por el pelo suelto con unas pequeñas ondas.
La fiesta estuvo a cargo de Xite&Co.
Las fotos son de Ernesto Villalva y el vídeo de Adrián Toscano, la wedding planner fue Eventaria Bodas.